Un decibelio, con el que se mide la intensidad de este sonido. Así podemos cuantificar la fuerza de un sonido, y esto nos permitirá saber si es capaz o no de dañar nuestro oído o incluso causar molestias. En este texto se tratará qué son exactamente los decibelios, cómo pueden ser perjudiciales para nuestra salud y el entorno que nos rodea, así como cómo medirlos de manera segura para no causarnos daño.
La contaminación acústica, al igual que la contaminación por ruido, puede resultar peligrosa para nuestra salud y el medio ambiente. Si estamos expuestos a altos niveles de ruido durante largos períodos, las consecuencias serán pérdidas auditivas y tinnitus permanente. También podría causar estrés con sonidos fuertes o ansiedad. Cualquier perro que ayude a un animal salvaje, como una ballena (si la sigue por sonido) o un delfín (depende de su ubicación), o incluso un pájaro. Este sonido podría significar que interfiera con su hábitat natural, impidiéndoles comunicarse con sus compañeros. Por un lado, una ballena que no pueda escuchar a otras ballenas—ya sea para escapar cuando los depredadores están cerca o ya sea porque la falta de dicha comunicación impide un alimentación mínimamente efectiva—podría no prosperar.
¿Entonces, qué queremos decir los que estamos demasiado acostumbrados a un sonido muy alto? Esta respuesta depende de cuánto tiempo lo estaremos escuchando. Cualquier sonido, reproducido a 85+ decibelios durante un período de solo ocho horas o más puede eventualmente causarte pérdida auditiva parcial. El nivel de volumen (85 dBC) es equivalente al volumen de una licuadora o una cortadora de césped. Sin embargo, podemos dañar nuestro oído mucho más rápido al exponerlo a sonidos aún más fuertes, como en un concierto de rock o al usar un martillo neumático. Por eso se vuelve obligatorio usar tapones para los oídos o protectores auditivos si estamos expuestos a sonidos fuertes durante un largo período. Mantengamos nuestros oídos seguros.
Un par de dispositivos típicos a considerar Motosierra correctamente. Esta herramienta generalmente es algo como un medidor de nivel de sonido. Decibelios: Se utiliza para entender el tono de la voz, es decir, cuánto más alto o bajo comparativamente. Aún necesitas saber a qué distancia está la fuente de ruido del micrófono que estás utilizando para medir, con el fin de obtener mediciones adecuadas. Si estamos midiendo sonido en un entorno al aire libre, deberíamos equipar nuestro equipo de prueba con un micrófono a prueba de agua. Una buena idea es utilizar una aplicación en nuestro smartphone que pueda medir niveles de sonido, para que podamos verificar el volumen a nuestro alrededor cuando visitamos diferentes áreas.
Se vuelve extremadamente importante proteger tus oídos, especialmente cuando trabajas en un entorno ruidoso. También puedes usar tapones para los oídos o protectores auditivos. Es igualmente valioso descansar los oídos después de una exposición continua al sonido. Asegúrate de que las máquinas o equipos que usas no emitan algún tipo de ruido, ya que esto solo añadirá más ruido. O si vives en algún vecindario, considera si tu ruido podría estar afectándolos y toma medidas para reducir actividades ruidosas como obras de construcción, fiestas o disposición de basura. De esta manera, estarás mostrando respeto por tus vecinos, pero también contribuyendo legítimamente a su paz.
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